ARCO 2016

Madrid

Del 24 al 28 de febrero de 2016

No cabe duda de que este es el año de ARCO. La feria madrileña alcanza la madurez en una edición en la que ha cumplido treinta y cinco años de historia y para la cual no se ha escatimado en esfuerzos. Simplemente hace falta pasear por los pabellones 7 y 9 de IFEMA para ver la evolución que se ha alcanzado con respecto a años anteriores. Como ya adelantaban desde la propia dirección, el nivel de exigencia ha sido muy alto, condición que se ha podido comprobar en las diferentes galerías que han participado este año (221 en total) en cuyos stands se ha visto obra muy seria y una distribución de la misma pensada y estudiada.

En este aspecto, hay que estar orgullosos desde la zona sur de la periferia ya que este notable aumento en la calidad y las exigencias de la feria no ha afectado a la creación artística andaluza, es más, la ha potenciado. En esta edición la nómina de artistas andaluces ha superado la treintena con creces, estando presentes prácticamente en todos los sectores y categorías de la feria.

A lo largo de los distintos stands se puede ver cómo son muchos los galeristas que han contado con representación andaluza para sus stands. En lo referente a espacios expositivos la representación sigue siendo escasa, manteniendo el número de galerías: las sevillanas Rafael Ortiz y Alarcón Criado, así como el espacio institucional de la diputación de Huelva, que cuenta con la presencia de cuatro artistas de la provincia que reflexionan sobre el territorio onubense: Mario Marín y Manuel Hidalgo (Colectivo Pacoperez), Francisco Javier Garrido Barroso (Garrido Barroso) y Seba Ventana, conocido como Wild Welba. Fuera de las galerías, también hay que destacar la presencia de otros artistas seleccionados por distintas instituciones como es el caso del cordobés Antonio Blázquez y la sevillana Julia Llerena, cuyas obras se exponen en el stand de ABC Cultural, desde el cual han confirmado que ocuparán una de sus portadas, próximamente. Y no hay que olvidar a la malagueña Leonor Serrano Rivas, ganadora del premio Solán de Cabras de Arte joven con ‘Movimiento armónico’, una instalación en la naturaleza que es empleada como medio de diálogo entre el espectador y el mundo animal.


*Foto izq: instalación de Leonor Serrano Rivas en el stand Premio de arte joven Solán de Cabras. Foto dcha: Jorgue Yeregui en el stand de Alarcón Criado

Como en años anteriores, los artistas veteranos siguen siendo los más numerosos: el ya fallecido José Guerrero está a la cabeza de este ranking, estando presentes sus pinturas abstractas en hasta cinco galerías. Muy de cerca le sigue Equipo 57. El colectivo de origen cordobés se puede encontrar en tres galerías entre las que destaca la sevillana de Rafael Ortiz, que cuenta con una gran cantidad de obra pictórica y escultórica del grupo artístico, desde sus comienzos hasta alguna de su última época. Luis Gordillo es otro de estos veteranos más que asentado en la feria, el cual se está haciendo habitual en la prestigiosa galería Marlborough en la que presenta ‘La isla cabeza de hombre’ (2014-15) un maravilloso acrílico en el que despliega su estudio del rostro humano y la psique, una línea que lleva un poco más allá en ‘Four Eyes Drowning’ (2015) colgada de la galería Luis Adelantado en la que de una manera más original sigue indagando sobre la psique humana basada en su propio inconsciente, una línea de trabajo ya algo repetida desde ediciones anteriores.

En Marlborough también hay que destacar la presencia de otros dos artistas andaluces: los malagueños Manuel Franquelo y Alfonso Albacete. El primero ha llamado mucho la atención del espectador con sus dos obras de la serie `Things in a room´: ‘Untitled #10’ y  ‘Untitled #6’ dos fotografías impresas sobre papel de aluminio entre las que destaca la segunda por hacer creer a los espectadores que se trata de una puerta propia de la galería. Por su parte, el artista antequerano Alfonso Albacete, que pierde importancia en cuanto a obras expuestas, está presente a través de ‘Natura cuatro’ su único acrílico en la feria en el que el espacio pictórico se distribuye por el espacio representativo mediante chorreones de pintura que muestran un paisaje de naturaleza.


*Luis Gordillo y Manuel Franquelo (izq); Alfonso Albacete (dcha) en el stand de la galería Marlborough

Tampoco hay que olvidarse de dos artistas que han conseguido un papel clave dentro de la galería Juana de Aizpuru como son: el malagueño Rogelio López Cuenca y la jiennense Cristina Lucas, dos indiscutibles en las apariciones de la galería madrileña que para esta edición cuenta con la obra de ambos en sus dos espacios: de López Cuenca hay que destacar que forma parte de la sección `Imaginando otros futuros´ (como único artista andaluz) en la que Juana de Aizpuru participa en una selección de algunas de las galerías más prestigiosas que han participado en los treinta y cinco años de historia de ARCO. En esta sección, se aborda una propuesta acerca del futuro al que alude el propio lema del programa, desde una perspectiva repleta de ironía característica de la obra de Rogelio López Cuenca, que cuenta con el propio contexto de la feria como objeto de trabajo. Por su parte Cristina Lucas, presente en la misma galería, pero en la sección general, expone ‘Estalt 5’ (2016) una videoinstalación formada por cinco monitores dispuestos verticalmente en los que aparecen cinco directores de orquesta que dirigen a un grupo de músicos, todas mujeres, mientras interpretan la quinta sinfonía de Beethoven. En esta pieza, la artista jienense sigue trabajando en los roles de poder sexistas de la sociedad de nuestro tiempo.

Una galería madrileña que bien podría ser andaluza, ya que representa en su espacio a tres artistas de esta comunidad, es la de Javier López y Fer Frances, entre cuyas paredes se exhiben las pinturas de Manuel León, las esculturas de Marina Vargas y los dibujos de Pilar Albarracín. La obra del primero de estos se representa a través de dos sugerentes piezas: ‘El Niño de Oro’ (2016) y ‘No se puede dar a dios por sentado’ (2014) dos lienzos en los que el sevillano vuelve a recurrir a un lenguaje pictórico basado en la tradición artística, cultural y antropológica de su tierra de origen. Por su parte Marina Vargas presenta una de sus venus que recientemente expuso en una temporal en el CAC de Málaga. Finalmente, Pilar Albarracín, presenta dos dibujos a boli en los que se repiten los motivos ornamentales de algunas piezas de estética “Kitsch nacional” que suele utilizar en su obra. La obra de la sevillana también está presente en la galería portuguesa Filomena Solares, una de las más destacadas del país vecino.

El ya fallecido Nacho Criado es otro artista que destaca en Formato Cómodo. La galería madrileña dedica una buena parte de su espacio en el stand 9C02, el cual es ocupado por dos piezas de pared y una gran escultura formada por tubos de metal y azulejos. Lo mismo ocurre con la obra del también fallecido Pepe Espaliú, el cual, como de costumbre siempre tiene su hueco en el stand de Pepe Cobo La galería de origen sevillano y con sede actual en Perú presenta dos piezas de Espaliú de los años 1987 y 199, con un origen bien distinto, ya que entre una y otra hay que establecer su conciencia de enfermo de SIDA, la cual le daría un giro a toda su obra.


*Foto izq: videoinstalación de Cristina Lucas en el stand de la galería Juana de Aizpuru. Foto dcha: obras de Mp&Mp Rosado y José Guerrero en el stand de Alarcón Criado

Es la pintura donde más presencia tienen nuestros artistas. Además de los veteranos ya nombrados, hay que destacar la importancia de artistas como: Miki Leal, Rubén Guerrero y Simón Zabell. La obra del primero, destaca en la galería F2 con una pieza titulada ‘Fred Perry’ de reciente factura, la cual, a pesar de su modesto tamaño, destaca por su calidad en el espacio de la galería madrileña. Ruben Guerrero y Simón Zabell, están representados con dos obras cada uno. Guerrero ocupa dos lugares estratégicos en el interior y el exterior de la galería Luis Adelantado, en cuyas telas se juega con la fidelidad de la representación de la realidad; mientras que Zabell está presente en dos galerías: la madrileña Álvaro Alcázar y la sevillana Alarcón Criado. En ambas presenta el artista malagueño obra en la que muestra su última serie de pinturas inspiradas en la literatura del escritor escoces Robert Louis Stevenson, a través de un viaje que le ha llevado a la Polinesia, para indagar en la idea del colonialismo.

En lo referente a las galerías andaluzas, desde Alarcón Criado siguen apostando por los autores de la tierra. De la amplia nómina de artistas que presenta en la sección principal, nueve en total, cuatro de ellos son andaluces, ofreciendo así una amplia gama de registros. El fotógrafo José Guerrero, repite por tercera vez con dos obras. Igual ocurre con MP&MP Rosado,  que presentan ‘Modelos y recipientes’ (2016) una serie de cantaros de barro a los que han cambiado su morfología, sometiendo a discusión la funcionalidad del objeto cuando este se convierte en obra de arte. Por su parte, Simón Zabell como se ha señalado anteriormente, expone una de sus pinturas titulada ‘Our men in Tahití’ (2016)

Por otro lado Rafael Ortiz, uno de los clásicos de la feria, vuelve a participar en el programa Solo/Duo, tras el éxito de la pasada edición. En esta ocasión ha afrontado un enorme reto, al contar con la presencia de Equipo 57 y la fotógrafa mexicana Graciela Iturbide, un tándem que no tiene tanta conexión pero que han sabido resolver muy bien desde el equipo, creando dos espacios bien definidos entre ambas obras. Una apuesta arriesgada, pero que demuestra la proyección internacional que se persigue desde la galería.

Después de un año en el que se hablaba de optimismo, aun no podemos sacar conclusiones, pero podemos afirmar que la creación contemporánea andaluza se implanta en una feria en la que se vuelve a ver el vaso medio lleno y en la que se han superado las exigencias planteadas desde una feria que promete ir a mejor.


*Foto izq: obra de Rubén Guerrero en el stand de la galería Luis Adelantado. Foto dcha: Equipo 57 en el stand de Rafael Ortiz


*Imagen de cabecera: obras de Manuel León y Marina Vargas en el stand de la galería Javier López & Fer Francés