Jueves, 21 Noviembre 2024
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JOSÉ GUERRERO, LA PARTE POR EL TODO
por Clara Bajo Publicado el 26 de Octubre de 2015

JOSÉ GUERRERO > Sierra Nevada
 
F2 Galería - Madrid
Hasta el 7 de noviembre de 2015


U
n aspecto fundamental que se ha mantenido como una constante en el devenir de las imágenes, desde la pintura al cine y, por supuesto, en la fotografía, es su percepción por el ojo humano. Cómo se recibiría aquello que deliberadamente se crea para presentarlo ante la mirada ha condicionado, tanto a favor como en oposición, el tratamiento que se les ha dado, se les da y se les seguirá dando probablemente a las representaciones formales creadas por y para el hombre. En este proceso tiene un papel fundamental la mente, ya que a ella corresponde la interpretación de la información codificada que el ojo recoge. Esta intervención del cerebro en la apreciación de las imágenes ha dado pie a numerosos estudios y análisis y supone el punto clave para los fundamentos psicológicos de la escuela alemana Gestalt. Entre sus principios cabe destacar la ‘Ley del cierre’, que establece que la experiencia visual de cada persona le lleva desde la infancia a conformarse una idea conceptual de una forma determinada grabada en nuestra psiquis, gracias a la cual somos capaces de imaginar en una vista parcial de un perro que realmente tiene patas y no está flotando. Tendemos a completar las figuras con las cuáles estamos familiarizados y de ello han sacado provecho artistas para profundizar en las lecturas de sus obras, como es el caso de Salvador Dalí. En cambio, en las fotografías reunidas en ‘Sierra Nevada’ por José Guerrero (Granada, 1979), más que ser una intención, este efecto en la percepción del espectador, es un suceso a priori ineludible.

Los paisajes que se suceden en esta exposición comienzan por presentarnos los aspectos más populares, conocidos y que enseguida vienen a nuestra mente cuando se nombra a Sierra Nevada. Tal como su título indica, piedra y nieve. El reconocimiento de estas imágenes nos lleva inevitablemente a completar las vistas fragmentadas de la cadena montañosa hasta alcanzar la idea de su conjunto al completo, mientras nuestra imaginación nos permite continuar las líneas trazadas por sus ascendentes laderas y verticales paredes, poniendo a prueba esa ‘Ley del cierre’ y constatando una de las máximas en la producción de este fotógrafo en la que se aprecia un gran interés por crear un concepto absoluto a partir de series secuenciales de paisajes concretos.

No obstante, en estas fotografías José Guerrero da un paso hacia un valor artístico formal frente al contenido, y a través del encuadre de su cámara el paisaje va descontextualizándose en un proceso opuesto a lo anteriormente descrito. Ahora se desmiembra en líneas y masas de piedra y nieve, hasta rozar la abstracción que no llega a materializarse por completo debido a las trazas familiares de los componentes que se presentan, especialmente las texturas de los materiales. De este modo, las nieves perpetuas de Sierra Nevada se presentan incrustadas en la montaña, creándose un juego de claroscuro casi monocromático que deja atrás el interés que Guerrero había mostrado en trabajos anteriores por la incidencia de la luz y las variaciones del color de paisajes muy similares entre sí según el momento de la toma, casi a la manera impresionista.

Esta perspectiva se encuentra mejor representada, en cambio, en la exposición que se le dedica desde julio en el Centro de Arte de Alcobendas en el contexto de PHotoEspaña 2015, ‘After the Rainbow, así como en la pasada muestra de Guerrero en la F2 Galería celebrada a principios de este año, ‘Panoramas. Respecto a estas, Sierra Nevada no solo evidencia esa formalización del objetivo artístico en su fotografía, sino también un viraje en el propio contenido. Los paisajes presentados anteriormente, en los que resaltaba la incidencia de la actividad del hombre en ellos, han dado paso ahora a una naturaleza pura, salvaje y ajena a nuestro control hasta llegar a resultar amenazante solo porque se nos escapa. Una naturaleza que en su condición de sublime ha sido sobradamente anunciada por los románticos como Friedrich o Turner y que, cada uno en su momento y situación, ahora José Guerrero expresa a través de una tendencia a la abstracción que refuerza esa superación a nuestra mente, a nuestras interpretaciones y percepciones sensoriales.

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PRESENTE CONTINUO - Sevilla (España) - 2015 - ISSN 2444-5231
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