Leonor Serrano Rivas (Málaga, 1986) visita España con la muestra ‘Limbs describe curves’, en la Galería Marta Cervera de Madrid. Aunque andaluza de nacimiento, lleva algunos años residiendo en Londres, hecho que ha marcado en cierta medida su producción. En este breve acercamiento, la artista nos habla tanto de sus proyectos presentes como futuros.
Paloma Soriano. Para empezar, es importante recalcar el hecho de que eres arquitecta de formación –aunque posteriormente cursaste la Licenciatura en Bellas Artes-. Esto ha marcado en gran medida tu producción… ¿Cómo relacionas arte y arquitectura?
Leonor Serrano Rivas. Como arquitecta piensas en el espacio como una sucesión de escenarios y es algo que está presente en muchos de mis primeros trabajos. En ‘Hogar’, ‘Parcela 1C’ o ‘Colección privada’, por ejemplo, el escenario a explorar era mi propia casa. Posteriormente, en ‘Colección Pública’ me fijé en las calles a medio construir como decorados a los que insertar una trama. Y más recientemente, ‘Yet the Sky is Still the Same’, ‘Una Larga Espera’, ‘Movimiento Armónico’ o este último proyecto, ‘Limbs Describe Curves’, donde construyo escenas mediante el cuerpo y el movimiento.
P.S. Quizás por esa formación de base, la instalación –además de la fotografía, video y performance- es lo que mejor permite expresarte…
L.S.R. Sí. Creo que es fundamental pensar el espacio de forma global: por un lado está la producción del proyecto en sí que, como antes mencionaba, suele tener que ver con la construcción de escenas, y por otro, su forma de instalarlo o materializarlo. Me es muy difícil pensar en mis trabajos sin que haya una interacción directa con la sala o lugar donde se van a presentar. En este caso, por ejemplo, creé un escenario (donde se situaba la proyección) añadiendo un suelo específico que para mí era fundamental y después, las esculturas se situaron en el espacio de detrás del escenario, el espacio entre bastidores. Así pensé la instalación como un lugar compuesto de dos partes, y era fundamental la relación entre ellas.
P.S. En cierto modo, cuestionas la realidad utilizando como medio la arquitectura…
L.S.R. Digamos que la arquitectura es una herramienta que me ayuda a formalizar las cosas de cierto modo, o incluso a aproximarme a ellas con una mirada condicionada, aunque no sea plenamente consciente en la mayoría de los casos. Pero mi actitud crítica no viene solo de la arquitectura. Mi entorno se cuestiona por otros muchos medios o motivos imposibles enumerar ahora.
P.S. Actualmente, expones de manera individual en la Galería Marta Cervera de Madrid, ‘Limbs describe curves’. En ella, concibes el espacio como un teatro. De hecho, para realizar las piezas presentes en la muestra te basaste en el libro ‘The Reinassance Stage’, que describe métodos escenográficos del teatro renacentista. ¿Intentas con ello traducir la esencia del texto a la línea de tu producción en su dimensión escenográfica? ¿Qué importancia tiene el lenguaje en este proyecto y en tu obra en general?
L.S.R. Todo este trabajo tiene su origen en la interpretación de unos textos teatrales. Por un lado, el título ‘Limbs describe curves’ es una frase extraída de un pequeño texto que marcó el comienzo del proyecto: ‘Sobre el teatro de las marionetas’, de Heinrich Von Kleist (1810). Entonces empecé a trabajar intentando explorar algunas de las ideas de este texto. Realicé pequeñas composiciones en el estudio, pruebas que debían moverse o remitir al movimiento de algún modo. Este texto presenta a las marionetas como esos cuerpos sin alma, que contienen una representación ficticia de un movimiento humano: una imagen. Más adelante, me encontré por casualidad el libro que mencionas y me fascinó. El mismo se describe como un libro-guía y esto mismo fue lo que hice. Lo utilicé como manual de instrucciones, traduciendo el texto y, sobre todo, sus diagramas en esculturas o composiciones espaciales y movimientos realizados por unos performers. Si te soy sincera, fueron los títulos de sus capítulos los que me cautivaron, por ejemplo: ‘How to turn a man into a rock or a similar object’: ‘How to make heavens in sections’: ‘How to make the sea rise, swell, get tempestous and change colour’ o ‘How to make paradise’. Al final creo que el proyecto está en un punto intermedio entre las primeras referencias y este último libro que simplemente aparece como una especie de guión teatral. En el vídeo documentación de la performance, por ejemplo, las y los bailarines intentan mediante sus movimientos convertirse en escenas, en tramoyas. Detrás de la pantalla o telón aparecen composiciones de objetos que intentan hacer las veces de “coro” de estas escenas proyectadas.
P.S. Aunque eres malagueña, en la actualidad resides en Londres. ¿Por qué decidiste traspasar las fronteras nacionales? ¿Crees que es necesario para prosperar como artista?
L.S.R. No creo que haya un método o guión a seguir para ser artista. Creo que, aunque un contexto pueda influir -y mucho-, realmente tiene más que ver con lo que tú quieras extraer del lugar en el que estás y la gente que te rodea. Me fui a Londres para continuar mis estudios, y, aunque me siento enormemente afortunada, no creo que sea algo necesario. A mi me ha servido enormemente, solo por el hecho de poner en cuestión tus formas de hacer y tu trabajo, y tener dos años dedicados a tu práctica, cosa que es un lujo enorme. Pero por supuesto que no tienes que estar en Londres para poder hacer esto.
P.S. ¿Qué destacarías del contexto artístico joven en Londres?
L.S.R. Terminé el máster a finales de agosto y realmente no he tenido tiempo para asimilar cómo es el contexto artístico fuera de la institución (estar dentro de una institución siempre es muy cómodo). Londres como centro -artístico, financiero- tiene muchas cosas malas, pero dentro de las cosas positivas destacaría la pluralidad que pude ver en mi máster, por ejemplo, ya que viene gente de contextos muy dispares. Me da la sensación de que la ciudad es tan poderosa que sabe acoger bien esta pluralidad y hacerla propia, como un producto británico “Made in Britain”, pero eso es ya otra cuestión.
P.S. Tras esto, resulta inevitable la siguiente pregunta. ¿Cómo ves el panorama del arte contemporáneo andaluz desde la perspectiva de vivir en el extranjero?
L.S.R. Es una pregunta difícil porque me fui de Málaga a los 18 años. Estudié en Madrid donde trabajé durante un tiempo para después marcharme a Londres. No haber estudiado en una ciudad andaluza te hace estar menos informada de lo que está sucediendo allí. Si que tengo y he tenido una relación personal y profesional con muchos artistas andaluces, aunque a muchos de ellos los conocí fuera. Entonces puedo a hablar solo lo de lo conozco de primera mano, y a la mayoría de ellos los admiro enormemente.
P.S. Proyectos futuros, allá donde sean…
L.S.R. Ahora mismo estoy desarrollando un taller infantil por Lavapiés (Madrid) como artista invitada dentro del proyecto ‘A la Vuelta de la Esquina’ en el que participa La Casa Encendida. Después pasaré unos días por casa, con la familia, y volveré a Londres. Tengo varias performances y eventos allí este mes: TenderBooks y en Lychee One Gallery, donde actualmente también participo en una colectiva. Alguna que otra colectiva vendrá meses más tarde: una en Santander en el mes de Noviembre en la galería José La Fuente que probablemente viaje a Méjico y Londres. En diciembre participo en un Project Space en Londres llamado Chisenhale Studios. Por último, estoy muy ilusionada con una colectiva en la que participaré en febrero en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Aunque los proyectos en sí se harán en el estudio, lugar al que tengo unas ganas enormes de volver, para poder seguir investigando y trabajando en todos estos nuevos proyectos.