Tres años después de su muestra individual `Por la razón o la plata´, en el Museo de Arte Contemporáneo de Santiago de Chile, el trabajo de la creadora andaluza Cristina Lucas (Úbeda, Jaén, 1973) vuelve a recalar en el país latinoamericano, esta vez en la Galería Video Arte Concreta perteneciente al Centro Matucana 100, un importante espacio cultural de la capital chilena. Lucas -cuyo nombre es cada vez más familiar dentro del panorama artístico de dicho país- forma parte de la tríada de artistas que protagonizan `Educación femenina. Historias animadas sobre la limpieza, la magia y el romanticismo´, un proyecto colectivo comisariado por Paco Barragán y que se podrá visitar en el espacio santiaguino hasta el 10 de abril.
Barragán, comisario y crítico de arte asturiano, ejerce desde comienzos del 2015 como Curador de Artes Visuales en Matucana 100. Su desempeño está detrás de la colaboración que actualmente existe entre dicho centro y el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC), orientada a exhibir, de manera continuada, obras de la colección leonesa en Chile. En este contexto, tres vídeo-animaciones seleccionadas por el comisario y pertenecientes a la colección MUSAC, cierran un ciclo expositivo en torno a la mujer y su rol en la sociedad: `El eje del mal´ de Cristina Lucas, `Quicksilver´ de la artista Zilla Leutenegger (Zúrich, Suiza, 1968) y `El artista de la vida moderna´ de Ruth Gómez (Valladolid, 1976).
Tal y como señala el comisario, a través de sus vídeos las artistas abordan, desde distintos ámbitos, el tema central de la muestra «de una manera irónica, humorística y corrosiva», al mismo tiempo que «llevan una denuncia hacia las situaciones de sumisión y falta de presencia de la mujer en el ámbito laboral». En el caso de Cristina Lucas, la ácida crítica al orden patriarcal y el abierto enfoque feminista que caracteriza a sus propuestas, se manifiesta a través de códigos visuales que nos presentan al género femenino dentro del ámbito de lo doméstico.
Mediante una animación de tres minutos de duración, la artista jienense narra la historia, aparentemente inocente, de una madre que instruye a su hija sobre los beneficios de la limpieza mientras que por la radio se oyen noticias sobre la guerra de Afganistán. La acción, que transcurre en un cuarto de baño, establece un paralelismo entre la educación femenina y la manipulación de la opinión global a través los medios de comunicación: tanto microbios como enemigos, deben ser exterminados.
El video como herramienta expresiva es una constante en la trayectoria de Lucas y, dentro de esta disciplina, la video-animación destaca -según el comisario- como un lenguaje atractivo, vanguardista y complejo, que se caracteriza por poseer menor carga histórica que otras técnicas, como por ejemplo, la pintura. Sobre este tema y refiriéndose a las obras que componen la muestra, Barragán añade: «Estas video-animaciones son muy pictóricas, es decir, se está pintando un cuadro en movimiento pero con ratón en vez de con un pincel, y supone también una re-interpretación irónica de la pintura por parte de estas artistas, desde un enfoque femenino o feminista, en el caso de Lucas».
Exposición: Educación femenina. Historias animadas sobre la limpieza, la magia y el romanticismo – Colección MUSAC
1 de marzo a 10 de abril de 2016
Galería Video Concreta. Centro Cultural Matucana 100
Avenida Matucana, 100. Santiago de Chile
*Imagen de cabecera: `El eje del mal´ (2003) de Cristina Lucas. Cortesía Colección MUSAC