I Bienal Universitaria Andaluza de Creación Plástica Contemporánea
Fundación Valentín de Madariaga
Sevilla
Hasta mediados de marzo, la Fundación Valentín de Madariaga albergará en su sede de Sevilla la primera edición de BIUNIC -Bienal Universitaria Andaluza de Creación Plástica Contemporánea- un proyecto que nace con vocación de continuidad y con el objetivo de servir como escaparate para la creación artística emergente del territorio andaluz.
La idea surge de la mano de Laboratorio de las Artes, una empresa dedicada a la gestión cultural capitaneada por Iván de la Torre Amerighi y Juan Ramón Rodríguez-Mateo, en colaboración con las facultades de Bellas Artes de Granada, Málaga y Sevilla. Entre ambos deciden dar forma a un proyecto conjunto con el fin de facilitar la visibilidad de la producción de artistas noveles formados en sus aulas.
La muestra recoge la obra más reciente de los doce jóvenes seleccionados, elegidos entre los más de noventa que presentaron candidatura. Este proceso se llevó a cabo por Laboratorio de las Artes con el asesoramiento de otros cinco profesionales del sector, entre los que se encontraban dos artistas, dos críticos y un gestor cultural. Los requisitos: ser estudiante de último curso de grado, máster o doctorado y presentar -durante el pasado otoño- un dossier avalado por un profesor en el que se reflejasen sus últimos trabajos.
Aunque las tres facultades pertinentes poseen su propia sala de exposiciones, es difícil que los proyectos que allí se exhiben tengan la repercusión adecuada. Por ello, con este formato de muestra colectiva pensado para desarrollarse de forma bienal, no solo se pretende una incursión real de nuevos talentos en el panorama artístico actual, si no que también busca convertirse en punto de referencia para analizar y conocer de forma precoz las vertientes plásticas y estéticas que van surgiendo en el sur de España.
Los elegidos para este primer llamamiento fueron los malagueños María Dávila (1990), Federico Miró (1991) y José Luis Valverde (1987); los sevillanos Manuel Casellas (1979), Alejandro Ginés (1988) y Belén Moreno (1987); los gaditanos Joaquín Araujo (Algeciras, 1990), Ana Barriga (Jerez de la Frontera, 1984) y José Manuel Martínez Bellido (1992); la granadina Luisa Alba (1973) y, por último, el melillense Javier Artero (1989) y la tinerfeña Mar Gascó (1990) que pudieron participar del proceso por estar formados en la Comunidad.
Foto izq: obras de Ana Barriga. Foto dcha: piezas de Alejandro Ginés.
Doce elegidos, algunos con más experiencia que otros, pero todos con la misma ilusión por encontrar su sitio en un escenario poco favorecedor. Lo cierto es que la variedad de materiales y técnicas, desde los dibujos a rotulador sobre metacrilato de Luisa Alba, los sugerentes lienzos de José Luis Valverde o las siempre inquietantes intervenciones de Manuel Casellas, hacen pensar en que existe un fructífero camino aún por recorrer. También habría que considerar los delicados grafitos de Araujo o la fotografía pintada de María Dávila, para casi terminar la muestra con el trazo enérgico y rompedor de Ana Barriga.
Así nace esta bienal, pionera en su forma y cargada de propósitos, aunque con un formato algo estático y agarrándose quizás al rebufo de otros programas más veteranos en la región como ‘DMENCIA’ en Córdoba, ‘MálagaCrea’ en Málaga, la beca ‘Daniel Vázquez Díaz’ en Huelva o la ‘Manuel Rivera’ en la ciudad de Granada. También otros programas de factura más reciente como ‘Iniciarte’ (Málaga, Sevilla, Córdoba) u otros más consolidados como ‘Desencaja’; incluso, en el último año y de forma alternativa ‘Plan Renove’ en Sevilla. Sea como fuere, por el momento solo queda dejar germinar las semillas plantadas para, en un futuro, analizar con perspectiva si BIUNIC consigue ser un modelo válido para la proyección del arte joven de Andalucía.