El contexto cultural y artístico que ha deparado la todavía latente crisis integral de los últimos años, lleva aparejado un cambio de metodología consecuente. Optar por iniciativas autogestionadas que miren a su alrededor más directo y a su pasado más inmediato se antoja necesario. De hecho, este campo independiente ofrece la oportunidad de trabajar en proyectos más laxos, relajados, terreno proclive en gran medida al ingenio o la inventiva, dentro de la mayor improvisación y experimentación que permiten.

 

Y es que en el caso remoto de estar inmersos en el mundo cultural de una ciudad como Sevilla y oír que en este ámbito va a tener lugar una iniciativa llamada `Plan Renove´, a priori llevaría a pensar en otros derroteros, sobre cuatro ruedas y motorizados en casi todos los casos.

 

Cuando a mediados de diciembre de 2013, comenzaron los ecos de un proyecto con ese enigmático título, pocos de nosotros -aturdidos y expectantes- podían suponer de qué se trataba o adelantar el alcance que tendría. A la vista de sus ideólogos y promotores -Sema D´Acosta y Marcelino García- el asunto pintaba bien para el mundo del arte contemporáneo de la ciudad y también para el alcance social del mismo como ente agitador. Como bien nos cuenta el primero «nació como proyecto alternativo y dinamizador para dar la oportunidad de exponer a artistas jóvenes fuera de los cauces comerciales». Contando desde el principio con Patricia Bueno del Rio como coordinadora, surgió con una considerable relación con el barrio del Pumarejo, disponiendo como espacio expositivo un local en plena plaza, tradicional corazón de la zona. Además, siempre ha estado en conexión con las ideas defendidas por Nicolás Bourriaud en `Estética Relacional´ (1998) y los experimentos del artista argentino Rirkrit Tiravanija, en lo que se trata de una intención por parte de los responsables de recuperar las prácticas artístico-sociales de experiencias activistas paradigmáticas previas en la ciudad como fueron The Richard Channin Foundation o Sala de eStar, ambas partícipes de la escena más underground y vinculadas con la zona en la década anterior. Quizá fuera el momento justo de rememorar iniciativas agitadoras y acertadas.

 

El proyecto ha cumplido ya sus dos temporadas activo, desde su puesta de largo el 4 de enero de 2014 con una muestra colectiva -con artistas de las dos generaciones implicadas (2000 y 2010)- que tomaba el mismo nombre. En su primera temporada, siguieron a la ya citada, dos exposiciones individuales de fotografía. La primera a partir de marzo de 2014 `Supervivientes´ de Óscar Romero (Sevilla, 1984) y la segunda `Teen(s)´ de Diego Díez (Barcelona, 1994) desde mayo del mismo año. Entre ambas tuvo lugar una cita importante que en los primeros meses de andadura aportó fuerza e insufló ánimos, la exitosa subasta ‘Solidown’, por esas mismas fechas.

 

El impacto del proyecto fue evidente, y las inauguraciones verdaderos eventos multitudinarios que aglutinaban gran parte de la escena artística joven de la ciudad; los potajes populares tuvieron también parte de la culpa y la incansable labor de promotores y coordinadora, tres cuartas partes de lo mismo.

* Imágenes de los potajes inaugurales. Exposiciones de Óscar Romero y Arturo Comas.
 

Ya en la segunda temporada (2014-15) la vinculación con el barrio del Pumarejo ha ido en aumento, incluso extendiendo el concepto relacional a la expansión espacial por las calles y establecimientos de la zona. Aunque bien es cierto que la primera exposición, `Todos vamos a morir´ de Arturo Comas (Sevilla, 1982) continuó con el modus operandi del año anterior, -el cual se mantendría siempre presente- desde ese mes de octubre `Plan Renove´ también se hizo cargo de las exposiciones en La caja habitada, espacio independiente del vecino entorno de La Alameda, con la idea de invitar a jóvenes artistas de otras ciudades a exponer en Sevilla. La primera fue con Pablo Vara (Almería, 1984) y su `De donde parten todos los caminos´, entre octubre y noviembre. Mientras tanto, el originario emplazamiento en el Farol había cambiado de dueños -también de pintura y mobiliario- y se convertía en La Sala, lo que representó un nuevo reto para los responsables del proyecto, cada vez más convencidos del futuro expandido de la iniciativa. Allí tuvieron lugar posteriormente las exposiciones `Some exhibitions are worst than others´, de Fernanda Oliveira (Oporto, Portugal, 1975) entre noviembre y diciembre, y la de Bea Sánchez (Jaén, 1986) `El artista capaz´, ya entre marzo y abril de este mismo año.

 

Pero para entonces la “ocupación” del barrio por parte de `Plan Renove´ era ya evidente. La ya apuntada programación de La caja habitada siguió en enero con `Álbum Familiar´ de José Luis Valverde (Málaga, 1987) y Javier Valverde (Málaga, 1991), continuó en marzo con `Nocturne´ de David Villalba (Sevilla, 1982) y terminaría con la todavía visitable `Reality Bites´ de David Mayo (Los Palacios y Villafranca, Sevilla, 1979). Además, por otra parte, el entorno inmediato de la primigenia ubicación ofrecía al proyecto oportunidades con un excelente resultado. Las multitudinarias inauguraciones con comidas populares recobraron nuevas fuerzas en la exposición que sí trascendió lo espacial y se extendió en enero al anejo Palacio del Pumarejo y otros bares y comercios colindantes; fue precisamente `Pumarejo´ de Laura Zorrilla (Sevilla, 1974), que también editó un fotolibro del mismo nombre. Asimismo, en febrero, el proyecto giró por la calle Fray Diego de Cádiz hasta la galería Weber Lutgen, para organizar la muestra `Warranty Void´ de Manuel Casellas (Sevilla, 1979).

 

En este punto del final de la segunda temporada es justo reconocer el esfuerzo continuado y el buen hacer de una iniciativa que seguramente en sus comienzos no pensaba en estar programando una tercera temporada y en recoger los frutos que ha ido madurando. No en vano y como nos comenta la coordinadora: «muchas exposiciones han sido la primera individual de artistas que han sido apuestas del equipo y que, a raíz de ella, han comenzado a tener mayor visibilidad». Son claro ejemplo de ello, Manuel Casellas, ganador de la última beca `Sevilla es talento para ti´, y Bea Sánchez galardonada recientemente con la beca `Vázquez Díaz´ de Huelva. Es esta cualidad de trampolín para artistas noveles un valor arriesgado pero capital de `Plan Renove´.

En la actualidad, tanto Sema D´Acosta como Patricia Bueno del Río aprovechan las primeras semanas del verano para dar forma al cambio de dinámica de la próxima temporada de un proyecto que ha encontrado en la adaptación una ley máxima para su supervivencia. Como nos dice Patricia: «el próximo año seguirá `Plan Renove´ como marca, pero ya sin espacio físico definido». De esta manera, en palabras del promotor «continuarán las exposiciones en espacios alternativos de la ciudad, y sobre todo en galerías, todo bajo la misma cobertura».

 

Además de esta aplicación relacional expansiva a toda la geografía de la ciudad hispalense, la intención de los responsables es dar un paso más como iniciativa que desde sus principios se identificó con el apoyo del ámbito artístico joven. «Queremos organizar exposiciones que sirvan para dar oportunidad a nuevos comisarios sevillanos» matiza D´Acosta. De hecho, la primera muestra de la nueva temporada será una colectiva en El Butrón, comisariada por la misma Patricia Bueno del Rio, que se podrá visitar a partir de septiembre. También se plantean un par de proyectos para la galería Weber Lutgen y alguna muestra más en otras salas del centro, con la idea de ir introduciendo poco a poco tanto a jóvenes artistas como a nuevos comisarios en el circuito de la ciudad.

 

En todo caso, es de agradecer la osadía y la apuesta sincera por el cambio de `Plan Renove´ cada temporada y desde sus propias raíces. Más en tiempos en que los abundan los falsos y enmascarados cambios cosméticos -tan de moda en política- y que asumen todos, cual limpiado de cara u operación estética. Se ha sabido partir de la modificación de las reglas del juego, aprovechando el cambio de régimen en las alturas, siempre con impulso social, voluntad de expansión y una adaptación camaleónica constante.

 

Se podría decir que el proyecto ha entendido con la experiencia de su trayectoria la premisa de “reciclarse o morir”, que bien podría ser también la de “expandirse o morir”. Aunque pueda sonar extremado el término, es una realidad que toda iniciativa autogestionada y que no ha encontrado apoyo o financiación institucional, vive casi a diario. Ante este marco, todo dependerá de si la renovación de `Plan Renove´ -redundancia redundante- logrará dinamizar el contexto del arte contemporáneo en Sevilla y sorprender tanto como cuando surgió. Solo lo podrá desvelar la próxima temporada, habrá que esperar hasta entonces…


* Algunas de las invitaciones a las inauguraciones, citas claves para el proyecto.

* Imagen de cabecera: Plaza del Pumarejo abarrotada durante la inauguración de la exposición de Laura Zorrilla.