Admiradora del arte urbano, esta pintora malageña se resiste a la función meramente decorativa del arte, haciendo hincapié en sus proyectos, en el aspecto social del mismo. Sus obras se suelen vincular al universo infantil debido a su aspecto primitivo o a la aparente imperfección de sus trazos. Cercana a un estilo surrealista, los dibujos de sus comienzos, han derivado en murales, esculturas, ilustraciones y performances.